“¡Tenían que vacunar a todo dios!”. Esta era la contundente declaración de una vecina de La Solana momentos antes de recibir la pauta completa de la vacuna contra la COVID-19. Esto demuestra las ganas que hay entre la población de recibir las dosis para inmunizarse. El Centro de Salud continúa la vacunación con velocidad de crucero desde hace semanas. Según datos oficiales, más 3.500 vacunas se han inoculado ya en el Centro de Salud solanero desde que se comenzó a vacunar allí. A esta cifra hay que sumarle las dosis administradas en los distintos centros sociosanitarios del municipio y en las viviendas de mayores, que se cuentan por cientos.
Alfonso Arias, coordinador de enfermería del Centro de Salud, ha explicado a la emisora municipal, Radio Horizonte, en qué momento se encuentra la campaña de vacunación, que comenzó con las residencias y centros sociosanitarios a principios de enero. Después arrancó la vacunación del resto de ciudadanos, a finales de enero y principios de febrero. “Hemos ido cumpliendo el plan previsto en función de las dosis que nos iban llegando, inoculando diariamente todas las disponibles”, señala Arias.
En La Solana ya tienen la pauta completa todos los mayores de 80 años y los cuidadores de grandes dependientes, además del personal sanitario y sociosanitario. “Estos días estamos terminando con las personas mayores de 70 años". También continuamos con la vacunación con pauta completa y primera dosis a los comprendidos entre 60 y 70 años”. Se están administrando solo dos sueros, Pfizer y AstraZeneca, aunque se espera la llegada de otras aprobadas por la EMA (Agencia Europea del Medicamento), como pueden ser Moderna y Janssen, esta última de una sola dosis.
Arias comparó el principio de la campaña con el momento actual. “Al principio había un ritmo más lento por la baja cantidad de dosis suministradas, pero el ritmo está aumentando porque cada vez recibimos más vacunas”. Como máximo, se han llegado a poner 300 vacunas en un día, pero la media del Centro de Salud se sitúa en unas 150, con algunas variaciones. A veces hay personas que no pueden acudir a su cita y ese día ‘sobran’ dosis. “Lo que hacemos entonces es adelantar la cita a una persona del día siguiente”. Las vacunas no se pueden guardar de un día para otro, ya que pierden su efectividad. “Si la vacuna pasa más de 6 horas en la jeringuilla, el fabricante no asegura su eficacia", argumenta el enfermero.
Las personas que reciben la dosis suelen preguntar qué vacuna se les va a inocular. Los enfermeros suelen calmar, informar y resolver las dudas de los pacientes antes y después de la inyección. “Ha habido distintas reacciones y nerviosismo entre los mayores, pero ninguno se ha negado a su vacunación”, asegura Arias. “Hasta el momento, todas las personas que se han citado para ser vacunadas en el Centro de Salud se han puesto su dosis”. Las vacunas pueden tener algunos efectos adversos leves y que afectan en función de la persona. Estos suelen ser febrícula, dolor de cabeza o muscular, y en ocasiones persistir durante un par de días después de la vacunación. La recomendación de los sanitarios para paliarlos es el uso de analgésicos habituales (como el paracetamol), y si los síntomas persisten en el tiempo visitar al médico de cabecera.
Los efectos de la vacuna se van haciendo cada vez más presentes en los repuntes y rebrotes. Los casos en los sectores vacunados son muy escasos, incluso inexistentes. Si alguien contrae el virus tras ser vacunado su cuadro sintomático es leve o no necesita ningún tipo de medicación, recuerda el enfermero. En La Solana encontramos el ejemplo, pues tras la vacunación de las residencias sociosanitarias, la del personal sanitario y los distintos grupos todavía no ha habido ningún caso entre aquellos que tienen la pauta completa. El siguiente segmento en recibir la vacuna es el conocido como “Grupo 7", que son personas con condiciones de muy alto riesgo que incluye, por ejemplo, a trasplantados. Según informó Arias, muy pronto se comenzará con la vacunación menores de 60 años, que es una amplia mayoría en la población.
Alfonso Arias aprovechó para agradecer a todo el personal del Centro de Salud por su trabajo, y al Ayuntamiento de La Solana por ayudarlos en todo lo que han podido. Finalmente, a todas las personas que están respetando el orden de vacunación y cumplen con los horarios para que todo transcurra con normalidad. También, animó a que todas las personas se pongan la vacuna, porque los distintos organismos e instituciones sanitarias avalan su seguridad. El enfermero añadió que para doblegar la pandemia es necesario este proyecto de vacunación.
Esperanza y alegría entre los mayores con pauta completa
Muchos son los vacunados durante estos días, hablamos con algunas de estas personas, quienes nos expresaron una gran alegría de recibir la vacuna. El miedo es un sentimiento que ha llenado a nuestros mayores durante toda la pandemia, muchos de ellos con la vacuna se despiden de él, aunque aseguran seguir tomando precauciones. Los mayores animan a todos a ponerse la vacuna para terminar cuanto antes con esta situación que tanto nos afecta a todos. Miran con esperanza al futuro, porque quieren volver a abrazar y reencontrarse con sus familiares, muchos de ellos a cientos de kilómetros, que llevan sin ver desde que comenzó esta situación.
