I.S.R. vecino de Valdepeñas, será juzgado la próxima semana en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Ciudad Real, por delitos de violencia doméstica, agresión sexual, detención ilegal, quebrantamiento de condena y allanamiento de morada, cometidos entre julio de 2018 y abril de 2019 en la persona de su ex pareja.
El acusado había sido ya condenado por el Juzgado de Valdepeñas por hechos similares y quebrantó presuntamente la orden de alejamiento dictada en la sentencia.
En abril de 2018, la víctima cortó la relación con el procesado, cansada de los malos tratos constantes a los que la sometía y por los que fue condenado en junio de 2018. Entre los meses de julio y agosto de 2018, I.S.R. retomó la relación en contra de la voluntad de su ex pareja, a la que continuó infligiendo malos tratos, sometiéndola a un continuo seguimiento y control y la llegó a agredir sexualmente.
En febrero de 2019 se produjo una nueva agresión. Y en abril, encontrándose la víctima en compañía de un amigo, el escrito de la Fiscalía recoge que el acusado forzó la entrada del domicilio de aquélla y la llevó en contra de su voluntad a la vivienda de un familiar, para allí ejercer de nuevo la violencia sobre ella y agredirla sexualmente, encontrándose en el mismo domicilio dos personas más, que no hicieron nada por evitarlo y por lo que también son procesados.
La madre de la víctima denunció a la policía su desaparición, después de que el acusado le impidiera responder a sus llamadas telefónicas. La Fiscalía pide para él, penas que oscilan entre 1 y 11 años de prisión, hasta sumar un total de 39 años. Para las otras dos personas procesadas, se piden 12 meses de multa con cuota diaria de 15 euros, por omisión del deber de impedir delitos.
ABUSOS A UNA MENOR
También la próxima semana y en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial, será juzgado D.M.M. de Tomelloso, acusado de un delito continuado de abusos sexuales sobre la hermana de su esposa, de solo 14 años, entre los meses de septiembre y noviembre de 2018. El acusado, de 20 años mantuvo sucesivas relaciones con la menor, aprovechando la ausencia del domicilio de la que era su pareja. El escrito de la Fiscalía precisa que no hubo violencia, ni intimidación para consumar las relaciones, si bien el consentimiento de la menor se considera que estaba “viciado” dada su escasa edad.
Los hechos fueron denunciados por la madre de la niña. Se piden para él 11 años de prisión y una indemnización a la víctima de 8.000 euros por daños morales.
