jueves. 25.04.2024

Hace cuatro días que Inside Futsal anunció que el presidente del Dinamo Samara, Igor Karpov, era detenido en una operación policial contra un soborno en la que también estaría implicado el hijo de un responsable del Ministerio del Interior ruso. Este equipo pagó las cláusulas de rescisión de Chino y Catela hace casi un mes para pelear por meterse en la Champions y de momento no han disputado ningún partido con ellos e incluso puede que no lo hagan. 

Karpov es el único soporte económico del Dinamo Samara y con su detención, y su presunta implicación en sobornos, existe la posibilidad que el club se quede sin dinero y que se pudiera disolver. Esto implicaría que los dos internacionales se podrían quedar sin equipo en condición de libres.

El especialista en fútbol sala, David Candelas, afirmó en su cuenta de Twitter que el presidente del Dina de Moscú, vecino del Samara, "fue encarcelado por un asunto parecido, el club desapareció y todavía debe dinero". Por lo que cabe, en gran medida, la posibilidad de que el equipo actual de Chino y Catela corra la misma suerte. 

Los dos exjugadores del Viña Albali Valdepeñas aún no habrían viajado a Rusia y se encontrarían en sus respectivas ciudades. Ellos, de momento, tampoco han publicado nada en sus redes sociales que haga ver que han aterrizado en Samara. 

El gaditano y el albaceteño ficharon por el equipo ruso en el mercado invernal (que se cerró el 31 de enero) cuadruplicando los sueldos que tenían en la Ciudad del Vino y con la intención de coger un proyecto en pleno crecimiento de un equipo formado para entrar en Europa a final de esta temporada. De disolverse la entidad,  la aventura de Chino y Catela en Samara habría sido efímera.

Los jugadores quedarían libres, pero los contratos vigentes de la plantilla de los rusos hace prever que se sucederán las demandas contra los máximos mandatarios del club, en caso de confirmarse la disolución. Fuentes relacionadas con el Valdepeñas han informado de que Chino ya se habría puesto en contacto con el Viña Albali para valorar una posible vuelta, algo que Catela, en principio, no habría hecho. 

¿Podrían fichar por el Viña Albali?

La normativa dice que después de rescindirse el contrato de un jugador, este no puede fichar por el mismo equipo del que se ha ido hasta pasados seis meses, pero sí cabría la opción de valorar la excepción que influye a los jugadores que quedan libres por disolución del equipo, a la que quizá podría sostenerse el Viña Albali Valdepeñas en caso de querer volver a contar con ellos, unos trámites que tendría que aceptar la RFEF. Además, en líneas generales, tampoco podrían jugar en la Primera y Segunda División Española, según la normativa, hasta la temporada que viene. 

En cuanto a las cláusulas de rescisión y al dinero pagado tanto por Chino como por Catela, ya está en las arcas del equipo vinatero y ese dinero no peligra, ya que la detención de Karpov es por temas externos al Dinamo Samara. 

Un debate que ya está encima de la mesa y solo hace falta esperar para ir viendo cómo se desarrollan y se oficializan las noticias. 

¿Qué pasa con Chino y Catela?