La línea de ayudas lanzada desde la Junta de Castilla-La Mancha a los sectores económicos más perjudicados por la pandemia es bienvenida, pero no se considera "suficiente". El presidente de la Federación Comarcal de Empresarios, FECEVAL, Cándido Simarro, reclama más y mayores ayudas directas a PYMES y autónomos. Reivindica el papel de FECEVAL ante el ayuntamiento, a la vista del convenio que el equipo de gobierno piensa suscribir con la Federación Provincial de Empresarios de Ciudad Real (FECIR).
Para Cándido Simarro, las ayudas públicas a la hostelería, el comercio y resto de sectores más expuestos a las consecuencias económicas de la pandemia tienen que ser directas y sin pasar por el tamiz de la banca.
!Las condiciones que determinan estas ayudas dificulta demasiado que las subvenciones puedan llegar a quienes las necesitan: acreditar un 40 por ciento de caída de las ventas entre abril y diciembre de 2020, y mantener un mínimo del 80 por ciento de puestos de trabajo durante al menos un año después de cobrar la ayuda", asegura.
Simarro valora bien la iniciativa del Gobierno regional, aprecia buena voluntad, pero comprende que el sector hostelero quiera movilizarse y protestar.
Ayudas directas
Las ayudas directas que distintos ayuntamientos están anunciando para hosteleros y comerciantes suponen unos cuantos cientos de euros para cada destinatario. "No es la solución, a menos que se incremente la cuantía al nivel de las aprobadas en Alemania u Holanda", reclama el representante empresarial.
El Gobierno municipal ha anunciado un convenio de colaboración entre el Ayuntamiento y la Federación Provincial de Empresarios de Ciudad Real, para el asesoramiento y gestión de las ayudas de la Junta de Castilla La Mancha. FECEVAL se considera obviado y reivindica su papel como representante del empresariado local; una cualidad que el alcalde de Valdepeñas no reconoce a esta organización.
