Ayer, 14 de junio, la Organización Mundial de la Salud conmemoró el Día de los Donantes de Sangre; un acto, el de la donación de sangre que durante 2020 se vio muy reducido, a causa de la pandemia. Felizmente, entre enero y mayo de 2021, las donaciones se han incrementado un 8 por ciento respecto del mismo periodo de 2019.
Por segundo año el banco de sangre de la Hermandad de Donantes del Hospital de Valdepeñas no puede realizar esa tradicional campaña de hemodonación, que pone de relieve la labor imprescindible de esta entidad. En 2020 el banco recibió 1.215 donaciones de sangre, frente a las más de 1.500 registrada en el año pre-covid 2019.
En las semanas iniciales, las más duras de la pandemia, las donaciones cesaron, hasta el inicio de la desescalada, en que se estableció un sistema de donación previa cita, que aún se mantiene.
Pero la sangre vuelve a su cauce, también entre personas, y en los cinco primeros meses de 2021 ha habido 513 donaciones, frente a las 474 del mismo periodo de 2019.
Valdepeñas tiene hoy cubiertas sus necesidades de sangre, gracias en buena medida, a la interconexión y gestión centralizada de todos los bancos de sangre de Castilla La Mancha.
Otro dato positivo es el rejuvenecimiento del perfil medio del donante.
Fausto Marín, presidente de la Hermandad de Donantes, recuerda que los beneficios de la donación son también evidentes para el donante y sus efectos son tanto biológicos como psicológicos.
En la noche de ayer, las letras corpóreas de Valdepeñas, en la Avenida Primero de Julio, se iluminaron de rojo, en homenaje a los donantes de sangre.
