A quince días del confinamiento decretado en todo el país, la Junta de Castilla La Mancha aprobaba a primeros de abril el aplazamiento del pago de tributos. Una medida que beneficiaría a 42.000 familias y empresas y supondría inyectar unos 58 millones de euros a la economía regional.
El Hospital de Valdepeñas continuaba inmerso en el plan de contingencia para hacer frente al coronavirus. Desde el primer fin de semana de abril amplió su capacidad hasta las 168 camas; 65 más de las que tiene habitualmente. El centro llegó en esas fechas a contar con 93 pacientes COVID. Eran los días más dramáticos tanto en el Hospital como en las residencias geriátricas.
El 14 de abril la Policía Nacional de Valdepeñas daba a conocer el número de sanciones impuestas en el primer mes de Estado de Alarma, por vulnerar las normas de confinamiento. En total, la policía había tramitado 269 actas de infracción y detenido a una persona.
Más de 50 establecimientos de distintos sectores con servicio a domicilio integraron el listado confeccionado y difundido por la Concejalía de Desarrollo Empresarial del Ayuntamiento para que los vecinos accedieran a productos de primera necesidad sin salir de casa y que pequeños establecimientos mejoraran sus posibilidades de venta durante el confinamiento.
El Ayuntamiento de Valdepeñas, en un primer cálculo, estimó que la recaudación de todo el año por tasas y precios públicos se reduciría en 1 millón y medio de euros, después de las bonificaciones y exenciones aplicadas a empresas de los sectores más afectados por la pandemia.
El jueves 21 de mayo fallecía el sacerdote Julián Ramírez Manzanares, víctima del coronavirus, a los 89 años de edad. Durante 32 años había sido párroco de La Asunción de Valdepeñas. Persona muy reconocida y querida en la localidad, Don Julián llevaba días ingresado en el hospital. Antes que él, también fallecía por COVID-19 el ex párroco de Los Llanos, Francisco Bravo.
En junio el Ayuntamiento lanzó medidas tributarias en apoyo a la hostelería y el comercio, que aunque fueron aprobadas por todos los grupos, generaron un fuerte debate con el grupo popular. Entre estas medidas estuvo la suspensión de la tasa de terrazas de bares y restaurante.
No todo era pandemia en la agenda informativa. Hacia las 11 y media del miércoles 3 de junio, el tejado de la Iglesia de la Asunción se quebraba y dejaba caer una amplia zona de tejas sobre la plaza Constitución, en la esquina de la escultura de Juan Alcaide. El incidente no produjo daños personales y dio lugar a obras de reconstrucción del tejado, que aún continúan.
